Mientras le pedía el bisturí a la fatigada enfermera, comenzó a percatarse de que estaba muy oscuro para ser un hospital.
El padre de familia perfecto abrió un álbum de fotos para recordar viejos tiempos. Tuvo que cerrarlo inmediatamente al escuchar a la policía derribando la puerta.
Sentado en el piano, siguiendo la rutina de todos los días, aquella noche sería más oscura que las demás.
Lo veía todos los días sentado tranquilo en el parque, sin imaginar aquello tan turbio que llevaba siempre en su bolso.
• Hoy desperté recordando el sueño que había tenido. Galletas, eso deseaba, abrí el tarro y tuve una sorpresiva desgracia. • Pleno invierno, la ventana abierta, podía ver al torpe sirviente cubierto de nieve, atemorizado por una sombra. • El héroe acostado en el piso moribundo, recordando su imposible niñez y pensando en su muerte inminente. • Carmen encontró el cuerpo colgando de una soga. Se sintió terrible porque ella era culpable, ella causó todo su sufrimiento.
~ Su sonrisa y sus ojos eran lo único que quería, lo que me hacían adicta. Pero en cuestión de segundos todo cambió en esa habitación.
~ Esos pensamientos frustrantes en el cuarto del hospital la obligaron a recrear la razón por la cual terminó allá.
~ Aquel acontecimiento que logré presenciar fue único, esa dulce niña que solía ver cada mañana, me hizo no volverla a ver más.
~ Aquella noche él estaba viendo su armario al igual que en la mañana; sin saber el por qué, tiempo después, se le apareció su reflejo el cual le habría contado su verdadera historia.
-Lo que escuchó fue un ruido estruendoso y alarmante, lo que vio le cambió su vida para siempre. -Desperté, estaba solo y asustado, solo con el recuerdo de haber visto aquella mujer. -Sólo se acercó más y más hasta que pudiera sentir la presencia malévola. -Sólo vi la acción de que ese pobre hombre fuera abandonado, luego lo volví a ver y se estaba camuflando entre la muchedumbre.
£ Impresionado desperté en el cuarto frío del sótano. A mi lado estaba inmóvil el hombre que me había acompañado toda la vida. Sentía que alguien me observaba en ese oscuro lugar, alguien más estaba ahí. £ El hombre con ojos torcidos quedó, cuando la diabólica muñeca le desgarró el cuello. Tenía que pasar lo inevitable. £ No sabemos donde estuvo ayer, ni con quien se casó. Quedaba un misterio sin resolver. ¿Donde estaba su mejor amigo? £ El joven escuchó sonidos raros afuera. Antes estaba viendo el documental. Pero el hombre fantasmal ya se había adentrado en la casa. Con miedo se decidió a investigar.
€ Ese día desperté en un hospital amarrado con una camisa de fuerzas, todo debido a esas voces qué pasan por mi cabeza. € Ese día pase por ahí viendo como esa pobre e indefensa niña era levantada contra el techo luchando contra el espectro que la atormentaba. € José nunca esperó encontrarse con eso, todo gracias a la curiosidad que le causó el entrar por esa puerta. € Por no controlar su ansiedad, Juana nunca supo lo qué pasó esa noche si se supone que todo era una salida tranquila con su novio y el amigo de su novio.
1. La eternidad le arrastraba junto a su pesadumbre. Recuerdo el infante aislado del mundo, pero feliz en el suyo propio. Esa inocencia se transformó en perturbación llevándolo a la luz, su propia historia.
2. “Se declara al sospechoso...”, fue lo último que escucho del juez antes de recordar. La multitud lo amaba. Pero los llantos, sangre y revelaciones llegaron. “¿Seguiré siendo perfecto?” se preguntó él.
3. Éramos el vacío y yo luchando por lo correcto e incorrecto. Miraba esa mañana la miseria, y mi mente sin rumbo, me trajo a lo alto donde los demonios en mi cabeza lentamente me arrastraban al limbo.
4. Perdido en la profundidad de su mirada, bebió su café. En cuestión de segundos en la ventana observó una ráfaga de luz, una risueña sonrisa de rápida escena, que cambió el rumbo de su basto corazón.
1. Sumergida en aquellos temores e inseguridades, escuchaba voces familiares rondando en mi cuarto.
2. El olor metálico de su sangre inundó el ambiente y recostada en la tina sonreía dejando todo atrás.
3. Ví aquel niño entrar al tétrico castillo, pero sus penumbras y enigmas se encargarían, lastimosamente, de distorsionar su débil ingenio.
4. Se miró en el espejo, esa niña amorosa y tierna no existía más. Su adolescencia iba opacando cada vez más esa luz. La oscuridad ahora presente marcaría en unos instantes su ultimo actuar aunque ahora solo piense en su reflejo.
La estoy viendo como llora, recuerdo haber visto su sonrisa por la mañana, ahora solo puedo pensar en cómo estára cuando llegue a su casa.
El lo perdió todo, de nuevo. Volvió al hueco de soledad y tristeza. Donde el dolor es la orden de todos los días, su sombra le dio la bienvenida, como si nunca se hubiera ido.
Estoy ahí, en simple existencia contemplando mi propia autodestrucción, en un limbo del cual no puedo salir sino solo existir.
No vimos con el espectro con el q se fue, no la vemos desde la mañana, y no sabemos cual será su destino.
•A pesar de todo, resultó ser su mejor decisión. El buscaba cumplir sus sueños; pero su corazón no lo dejaba, al mismo tiempo le pedía a gritos que lo hiciera.
•Su agonía duró horas. Lo habían estado siguiendo la última semana. Desde temprano el día había sido lúgubre, el viento era testigo de lo que iba a suceder.
•Iba buscando una salida cuando escuché que susurraban mi nombre. Pensé si sería un sueño o si quizá me había vuelto loca. Decidí mirar hacia atrás; ya sabía de quien se trataba todo.
•Vi como llegaba de la universidad. Muy angustiada abrió la puerta de su casa, donde la esperaban sus padres con lágrimas en los ojos.
Mi temor aumentaba cada vez más mientras escuchaba los pasos de alguien acercándose, y fue ahí cuando supe que no podría huir de este manicomio. Mi tez morena se tornaba pálida progresivamente.
El día de su muerte, solo queda el recuerdo de cuando la bella Martina salió a la plaza como habituaba, sin saber lo que le esperaba. Manuel se levantó de golpe de su cama, y cuando vio su casa tal y como estaba, se dio cuenta de que todo fue un sueño y que no había que huir de ningún mal. Antes de que fuese ejecutado ante todos por su vil acusación, el hombre tuvo una expresión en su pálido rostro, como si recordara algo de su pasado.
1) La vi saltar, los recuerdos, los felices recuerdos es todo lo que queda aunque el sentimiento de tristeza no cesa. Ahora estoy en mi casa pensando en lo que voy a hacer. 2) De caminar ellos han desistido tras perder las alas del vuelo. 3) Estaba acechando al indefenso sin percatarse del inminente peligro. Un paso, después otro y así la caza comenzó. 4) Yo río pero ella llora, mucho antes los dos reíamos pero dentro de poco solo ella llorará. Las memorias de aquella cálida tarde desaparecen y el calor de su pecho se transforma en un frío invernal.
- Permaneció temeroso, pensando en lo que desde un principio lo acechaba. Sabiendo que esa misma noche se vería forzado a soñar lo que ningún otro mortal era capaz de comprender. - Le llamaban demencia, y no eran ellos quienes lo sentían. Le llamarán insania, y no serán ellos quienes temerán. Hablan, pero soy yo quien cada noche escucha a sus demonios repetirlo sin pausa. - Su muerte fue cruda, inesperada. Observé como, con la mirada perdida en el océano, ella se adentraba en su pensamiento. Podía ver en cada lágrima como la culpa la consumía, y algo más… - Él sintió el paralizante miedo, al comprender lo absurdo que era divisar fuera a esa pequeña niña mirarlo detenidamente, estando encerrado en un submarino en las profundidades del mar.
Estaba ahí, suspendido en el aire, con nada en su mente. Bajando cada vez más rápido pero dócil esperando su inevitable fin.
Recordé los días felices de mi infancia, mientras mi cuerpo se calcinaba, imaginé un brillante futuro pero todo es un recuerdo desde mi muerte.
Paseando en el parque vi un atroz evento, él como un animal violento y asqueroso aprovechándose de su presa imponiendo su semilla a toda costa sin importarle nada más.
Él estaba sentado, vestido de rayas negras con la mente revuelta rodeado de una multitud y de ángeles de muerte recordando el fatídico amor que lo trajo hasta aquí.
• Finalmente ví cómo él se dirigía al risco donde había perdido la vida la noche anterior. Por su expresión, sentí que él la había visto por última vez, y solo quería decir “lo siento por todo”.
• Mientras el agua entraba a mí, recordé como hace unas horas me encontraba recostado en mi alcoba, y ahora veía un futuro oscuro donde no llegaría el amanecer. Sentía como el alma salía de mi cuerpo.
• Sobre la gélida nieve, exhausto y a punto de perder la conciencia, él suspiraba, mientras su mente hallaba una explicación a su amnesia y el por qué era buscado con la intención de ser arrestado.
• Inicia el día normal, con la misma mujer a su lado desde los 20, un día rutinario normal; sólo que esta vez, nada de lo mencionado antes era lo que debía ser. La jaqueca no le permitía pensar.
- Aterrorizada, lo miró con lágrimas en los ojos y le dijo “tengo miedo”. Eso fue lo último que él pudo escuchar de su voz. - Lentamente sintió como su alma abandonaba su cuerpo mientras se adentraba en un caos interminable sin retorno alguno. El caos que ella misma había construido junto a él. - Lo veo y lo sigo. Lo abrazo y no se da cuenta. Le hablo y no me escucha. Espero a que se separe de sus amigos para al menos sentir su cuerpo atravesar el mío. Solo me gustaría que me viera una vez más. - Dicen que el primer amor de cada persona debería ser el propio. Pero esto solo lo sabía uno de los dos.
Caminé por el parque pensando en lo que ayer deseaba comer, pero me di cuenta tarde del abismo al que iba. Mi problema de salud cada vez se ponía peor.
Sujeto como un ladron fue condenado por el atroz crimen que había hecho.
Lamentándose y viendo su destino murió solo en su casa, deseando una compañía.
Juan pensaba junto a mí en el cementerio sobre su niñez recordando su vida cuando cayó al abismo de la depresión.
* Una rivalidad infinita pues seguían en busca de la liberación absoluta, noches frías días calurosos y todo pintado de rojo. Pese todo el caos solo uno sobrevive a este rojo.
* Y así en lo amargo de mi profundo pensamiento concluí que el mejor camino sería llegar al silencio infinito, pues así su inocente risa no tendría que llegar a mi débil corazón.
* Y para cuando me di cuenta, sus corazones ya estaban unidos bajo el hilo rojo del destino, pues caer al abismo de la desesperación no era un futuro que alguno permitiría.
* Andaba desesperado huyendo bajo un cielo plagado de lluvias y rayos, recordó el pasado donde por una necesidad tuvo que arrepentirse de un futuro condenado. A pesar de los esfuerzos su huida fue en vano.
Mientras le pedía el bisturí a la fatigada enfermera, comenzó a percatarse de que estaba muy oscuro para ser un hospital.
ResponderEliminarEl padre de familia perfecto abrió un álbum de fotos para recordar viejos tiempos. Tuvo que cerrarlo inmediatamente al escuchar a la policía derribando la puerta.
Sentado en el piano, siguiendo la rutina de todos los días, aquella noche sería más oscura que las demás.
Lo veía todos los días sentado tranquilo en el parque, sin imaginar aquello tan turbio que llevaba siempre en su bolso.
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ResponderEliminar• Hoy desperté recordando el sueño que había tenido. Galletas, eso deseaba, abrí el tarro y tuve una sorpresiva desgracia.
ResponderEliminar• Pleno invierno, la ventana abierta, podía ver al torpe sirviente cubierto de nieve, atemorizado por una sombra.
• El héroe acostado en el piso moribundo, recordando su imposible niñez y pensando en su muerte inminente.
• Carmen encontró el cuerpo colgando de una soga. Se sintió terrible porque ella era culpable, ella causó todo su sufrimiento.
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ResponderEliminarElla era feliz en su niñez, cuanto más pasaba el tiempo, más depresiva era hasta que una noche a sus 39 años, llegó al límite.
ResponderEliminarComo policia jamás vi un crimen tan atroz, hundido en alcohol e ira, hizo lo que hizo.
Mi novia me está engañando, aunque antes tuvimos maravillosos momentos, ahora tengo miedo de que la rabía me consuma y haga algo que no quiero.
Él escucha voces en su cabeza. Antes era alguien normal, dos hijos, una esposa y ahora no se sabe quien más.
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ResponderEliminar~ Su sonrisa y sus ojos eran lo único que quería, lo que me hacían adicta. Pero en cuestión de segundos todo cambió en esa habitación.
ResponderEliminar~ Esos pensamientos frustrantes en el cuarto del hospital la obligaron a recrear la razón por la cual terminó allá.
~ Aquel acontecimiento que logré presenciar fue único, esa dulce niña que solía ver cada mañana, me hizo no volverla a ver más.
~ Aquella noche él estaba viendo su armario al igual que en la mañana; sin saber el por qué, tiempo después, se le apareció su reflejo el cual le habría contado su verdadera historia.
-Lo que escuchó fue un ruido estruendoso y alarmante, lo que vio le cambió su vida para siempre.
ResponderEliminar-Desperté, estaba solo y asustado, solo con el recuerdo de haber visto aquella mujer.
-Sólo se acercó más y más hasta que pudiera sentir la presencia malévola.
-Sólo vi la acción de que ese pobre hombre fuera abandonado, luego lo volví a ver y se estaba camuflando entre la muchedumbre.
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ResponderEliminar£ Impresionado desperté en el cuarto frío del sótano. A mi lado estaba inmóvil el hombre que me había acompañado toda la vida. Sentía que alguien me observaba en ese oscuro lugar, alguien más estaba ahí.
ResponderEliminar£ El hombre con ojos torcidos quedó, cuando la diabólica muñeca le desgarró el cuello. Tenía que pasar lo inevitable.
£ No sabemos donde estuvo ayer, ni con quien se casó. Quedaba un misterio sin resolver. ¿Donde estaba su mejor amigo?
£ El joven escuchó sonidos raros afuera. Antes estaba viendo el documental. Pero el hombre fantasmal ya se había adentrado en la casa. Con miedo se decidió a investigar.
€ Ese día desperté en un hospital amarrado con una camisa de fuerzas, todo debido a esas voces qué pasan por mi cabeza.
ResponderEliminar€ Ese día pase por ahí viendo como esa pobre e indefensa niña era levantada contra el techo luchando contra el espectro que la atormentaba.
€ José nunca esperó encontrarse con eso, todo gracias a la curiosidad que le causó el entrar por esa puerta.
€ Por no controlar su ansiedad, Juana nunca supo lo qué pasó esa noche si se supone que todo era una salida tranquila con su novio y el amigo de su novio.
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ResponderEliminarElla se encuentra sola sin poder escapar. Lo único que la acompaña es el poco de cordura que le queda y su sed de venganza.
ResponderEliminarSonia, echada en el suelo soñando en poder recuperar su antigua vida, donde vivía feliz con su hija, antes del terrible incidente.
Julia y yo íbamos al cine, pero se escuchó el grito de una dama, yo le rogué que no fuera pero no me hizo caso,
Mateo mira a su alrededor para ver si nadie lo sigue, con una mirada perturbada se esconde en un callejón para escapar.
1. La eternidad le arrastraba junto a su pesadumbre. Recuerdo el infante aislado del mundo, pero feliz en el suyo propio. Esa inocencia se transformó en perturbación llevándolo a la luz, su propia historia.
ResponderEliminar2. “Se declara al sospechoso...”, fue lo último que escucho del juez antes de recordar. La multitud lo amaba. Pero los llantos, sangre y revelaciones llegaron. “¿Seguiré siendo perfecto?” se preguntó él.
3. Éramos el vacío y yo luchando por lo correcto e incorrecto. Miraba esa mañana la miseria, y mi mente sin rumbo, me trajo a lo alto donde los demonios en mi cabeza lentamente me arrastraban al limbo.
4. Perdido en la profundidad de su mirada, bebió su café. En cuestión de segundos en la ventana observó una ráfaga de luz, una risueña sonrisa de rápida escena, que cambió el rumbo de su basto corazón.
1. Dio el primer paso para empezar su año escolar sin saber que este sería el último de su vida.
ResponderEliminar2. Ella dándole su amor incondicional mientras él con sus excusas mataban lo que algún día existió.
3. Por fin estaba ocurriendo el momento que toda hija desea. Yo sólo pensaba en lo rápido que creció y en esa decisión tan errónea que había tomado.
4. La realidad de la que escondía volvió a mí. Ya todo lo había superado, su ausencia no me quitaba el sueño. Pero con solo un aroma hizo que pasara.
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ResponderEliminar1. Sumergida en aquellos temores e inseguridades, escuchaba voces familiares rondando en mi cuarto.
ResponderEliminar2. El olor metálico de su sangre inundó el ambiente y recostada en la tina sonreía dejando todo atrás.
3. Ví aquel niño entrar al tétrico castillo, pero sus penumbras y enigmas se encargarían, lastimosamente, de distorsionar su débil ingenio.
4. Se miró en el espejo, esa niña amorosa y tierna no existía más. Su adolescencia iba opacando cada vez más esa luz. La oscuridad ahora presente marcaría en unos instantes su ultimo actuar aunque ahora solo piense en su reflejo.
La estoy viendo como llora, recuerdo haber visto su sonrisa por la mañana, ahora solo puedo pensar en cómo estára cuando llegue a su casa.
ResponderEliminarEl lo perdió todo, de nuevo. Volvió al hueco de soledad y tristeza. Donde el dolor es la orden de todos los días, su sombra le dio la bienvenida, como si nunca se hubiera ido.
Estoy ahí, en simple existencia contemplando mi propia autodestrucción, en un limbo del cual no puedo salir sino solo existir.
No vimos con el espectro con el q se fue, no la vemos desde la mañana, y no sabemos cual será su destino.
1.Ya no se me ocurre nada, en mi discurso de mañana, ni una palabra podré decir.
ResponderEliminar2.Lo vi sonreír maquiavélicamente mientras miraba la orca, como si estuviera satisfecho por lo que había cometido.
3.Pensó que era hora de partir, y dejar atrás todo con lo que ella había iniciado, para buscar lo que tanto anhelaba.
4. Pregunto y exclamó en el psiquiatra: "¿¡Cómo no pueden verlos ni escucharlos!?
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ResponderEliminar•A pesar de todo, resultó ser su mejor decisión. El buscaba cumplir sus sueños; pero su corazón no lo dejaba, al mismo tiempo le pedía a gritos que lo hiciera.
ResponderEliminar•Su agonía duró horas. Lo habían estado siguiendo la última semana. Desde temprano el día había sido lúgubre, el viento era testigo de lo que iba a suceder.
•Iba buscando una salida cuando escuché que susurraban mi nombre. Pensé si sería un sueño o si quizá me había vuelto loca. Decidí mirar hacia atrás; ya sabía de quien se trataba todo.
•Vi como llegaba de la universidad. Muy angustiada abrió la puerta de su casa, donde la esperaban sus padres con lágrimas en los ojos.
Mi temor aumentaba cada vez más mientras escuchaba los pasos de alguien acercándose, y fue ahí cuando supe que no podría huir de este manicomio. Mi tez morena se tornaba pálida progresivamente.
ResponderEliminarEl día de su muerte, solo queda el recuerdo de cuando la bella Martina salió a la plaza como habituaba, sin saber lo que le esperaba.
Manuel se levantó de golpe de su cama, y cuando vio su casa tal y como estaba, se dio cuenta de que todo fue un sueño y que no había que huir de ningún mal.
Antes de que fuese ejecutado ante todos por su vil acusación, el hombre tuvo una expresión en su pálido rostro, como si recordara algo de su pasado.
Mi gato salió atemorizado corriendo, voy tras de el y al subir la mirada no podía creer lo que estaba viendo.
ResponderEliminarSabían que no era lo correcto y la realidad cumplía su labor, algo inesperado estaba apunto de suceder.
No todo lo que haces está bien, pero todo tiene una razón. Mi razón hizo que ahora esté pagando y dando mi último adiós.
Todos veíamos ambos lados. El sufrimiento de ella anhelando descansar, mientras ellos suplicaban a gritos el no dejarla ir.
1) La vi saltar, los recuerdos, los felices recuerdos es todo lo que queda aunque el sentimiento de tristeza no cesa. Ahora estoy en mi casa pensando en lo que voy a hacer.
ResponderEliminar2) De caminar ellos han desistido tras perder las alas del vuelo.
3) Estaba acechando al indefenso sin percatarse del inminente peligro. Un paso, después otro y así la caza comenzó.
4) Yo río pero ella llora, mucho antes los dos reíamos pero dentro de poco solo ella llorará. Las memorias de aquella cálida tarde desaparecen y el calor de su pecho se transforma en un frío invernal.
- Permaneció temeroso, pensando en lo que desde un principio lo acechaba. Sabiendo que esa misma noche se vería forzado a soñar lo que ningún otro mortal era capaz de comprender.
ResponderEliminar- Le llamaban demencia, y no eran ellos quienes lo sentían. Le llamarán insania, y no serán ellos quienes temerán. Hablan, pero soy yo quien cada noche escucha a sus demonios repetirlo sin pausa.
- Su muerte fue cruda, inesperada. Observé como, con la mirada perdida en el océano, ella se adentraba en su pensamiento. Podía ver en cada lágrima como la culpa la consumía, y algo más…
- Él sintió el paralizante miedo, al comprender lo absurdo que era divisar fuera a esa pequeña niña mirarlo detenidamente, estando encerrado en un submarino en las profundidades del mar.
Estaba ahí, suspendido en el aire, con nada en su mente. Bajando cada vez más rápido pero dócil esperando su inevitable fin.
ResponderEliminarRecordé los días felices de mi infancia, mientras mi cuerpo se calcinaba, imaginé un brillante futuro pero todo es un recuerdo desde mi muerte.
Paseando en el parque vi un atroz evento, él como un animal violento y asqueroso aprovechándose de su presa imponiendo su semilla a toda costa sin importarle nada más.
Él estaba sentado, vestido de rayas negras con la mente revuelta rodeado de una multitud y de ángeles de muerte recordando el fatídico amor que lo trajo hasta aquí.
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ResponderEliminar• Finalmente ví cómo él se dirigía al risco donde había perdido la vida la noche anterior. Por su expresión, sentí que él la había visto por última vez, y solo quería decir “lo siento por todo”.
ResponderEliminar• Mientras el agua entraba a mí, recordé como hace unas horas me encontraba recostado en mi alcoba, y ahora veía un futuro oscuro donde no llegaría el amanecer. Sentía como el alma salía de mi cuerpo.
• Sobre la gélida nieve, exhausto y a punto de perder la conciencia, él suspiraba, mientras su mente hallaba una explicación a su amnesia y el por qué era buscado con la intención de ser arrestado.
• Inicia el día normal, con la misma mujer a su lado desde los 20, un día rutinario normal; sólo que esta vez, nada de lo mencionado antes era lo que debía ser. La jaqueca no le permitía pensar.
- Aterrorizada, lo miró con lágrimas en los ojos y le dijo “tengo miedo”. Eso fue lo último que él pudo escuchar de su voz.
ResponderEliminar- Lentamente sintió como su alma abandonaba su cuerpo mientras se adentraba en un caos interminable sin retorno alguno. El caos que ella misma había construido junto a él.
- Lo veo y lo sigo. Lo abrazo y no se da cuenta. Le hablo y no me escucha. Espero a que se separe de sus amigos para al menos sentir su cuerpo atravesar el mío. Solo me gustaría que me viera una vez más.
- Dicen que el primer amor de cada persona debería ser el propio. Pero esto solo lo sabía uno de los dos.
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ResponderEliminarCaminé por el parque pensando en lo que ayer deseaba comer, pero me di cuenta tarde del abismo al que iba. Mi problema de salud cada vez se ponía peor.
ResponderEliminarSujeto como un ladron fue condenado por el atroz crimen que había hecho.
Lamentándose y viendo su destino murió solo en su casa, deseando una compañía.
Juan pensaba junto a mí en el cementerio sobre su niñez recordando su vida cuando cayó al abismo de la depresión.
* Una rivalidad infinita pues seguían en busca de la liberación absoluta, noches frías días calurosos y todo pintado de rojo. Pese todo el caos solo uno sobrevive a este rojo.
ResponderEliminar* Y así en lo amargo de mi profundo pensamiento concluí que el mejor camino sería llegar al silencio infinito, pues así su inocente risa no tendría que llegar a mi débil corazón.
* Y para cuando me di cuenta, sus corazones ya estaban unidos bajo el hilo rojo del destino, pues caer al abismo de la desesperación no era un futuro que alguno permitiría.
* Andaba desesperado huyendo bajo un cielo plagado de lluvias y rayos, recordó el pasado donde por una necesidad tuvo que arrepentirse de un futuro condenado. A pesar de los esfuerzos su huida fue en vano.
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ResponderEliminar-Me sumergí en la noche fría percatándome que la brisa no era el único producto de la noche.
ResponderEliminar-Y al despertar ,lo único que tenía en su cabeza era el recuerdo de su nerviosa voz rogando clemencia.
- El hombre de la silla eléctrica recordaba su sufrida infancia y su futuro electrizante final.
- Rodrigo y yo estábamos atrapados y escuchamos los pasos de un sujeto acercándose a la habitación.