~ Me desperté debido al ardor que provocaban las llamas en mi piel causadas por el accidente que no puedo recordar. ~ Él no era capaz de aceptarlo, pero ya no podía negarlo, ella lo estaba engañando y con lágrimas en los ojos dijo:"Si yo no puedo tenerla nadie más lo hará". ~ Solo él sabía que estaba por suceder, sin razón aparente todos se comportaban como si algo o alguien los controlara. ~ Tal vez él podría salvarse, pero aquellas voces me decían una y otra vez que lo empujara...
~ Despierto del sueño, abro mis ojos y veo que todo es oscuro, húmedo, rodeado de tierra. Me tranquilice durmiendo con esperanza de recordar. Después de todo, mis memorias retoman al pensar que vivo.
~ El brillo de sus ojos refleja la linda y alegre vida que tengo, pero con tristeza me levanto y pienso que ese brillo se esta apagando con el tiempo.
~ Recuerdos de siglos y eones pasados en lugares donde todo era tristeza. Despues llegué de nuevo al lado feliz de la vida , pasando tiempo frente al demonio violento que atormenta a las almas muertas encontradas bajo la tierra.
~ Noche de gran brisa, cuando la gente se juntaba con sus amados en casa, un ruido desató la tensión del pueblo. Provenía del muelle pocos lo vieron pero no volvieron a ser los mismos.
-Un nuevo vecino llegó, era amargado y no le gustaba hablar con nadie, se escuchaba decir en las noches "La muerte es libertad, yo te liberé de este infierno".
-Una señora viene y me saluda. Estaba en mi casa, solo. Leía las cartas de siempre, recordando lo que había hecho. Ya era hora de partir.
- Era un juguete, no podía moverse. Llegó su ayuda, él estaba en colapso.
-Su fin llegaría, él la estaba observando, el mensaje llegó.
~Un olor pútrido llenaba la habitación pero él seguía acariciando al desafortunado ya sin alma mientras me dirigía la misma sonrisa traviesa. ~Y por cada cuchillada que me propinaba, un deleite repentino brotaba dentro de mí. ~Tarde en la noche apagó la luz con el rostro impasible, el día anterior se había lamentado hasta el cansancio, 3 días después soltaba carcajadas donde él descansaba. ~La conductora no podía respirar de tanto reír pero detrás de esa sonrisa forzada se notaba cierto sentimiento de preocupación, parecía que ni ella sabía el camino.
• Le da la espalda a la luz sin dudarlo. Se dirige hacia el abismo con una postura soberbia. La soledad hermosa y absurda.
• Desde aquí observo el angustioso transcurrir de mi pasado. Tal valor adquirió mi corazón que nada temo ya.
• Solo en casa el frágil niño se esconde al escuchar el crujido de la puerta. Desde el armario busca la criatura que desde su imaginación se burla. Si está en su mente, ¿quién entró a la habitación?
• Al final del camino vio aleteando una mariposa. Su mirada regresó al pasado y soltó un pesado suspiro lleno de culpabilidad. Comenzó como un tornado y terminó como un aleteo. Que infortunio.
La velocidad marcó su historia. Un automóvil que mancho su historia dándole a elegir un deplorable futuro que no quiere aceptar.
Ese día determino mi vida. Aún de niño nunca me sentí capaz de ser carnicero, sin embargo aquella tarde me lo demostraría y más allá lo convirtió en un pleno placer.
Su llanto era asfixiante causado por su paisaje inmediato. Por su rostro se sabía que no volvería a ser la misma de ayer, creando un nuevo nacer sin sentido para mañana.
Miraba su tablero, el plan era perfecto y ya vendría la hora de actuar aunque en el fondo, su conciencia tambaleaba por su poca frialdad.
El aroma estaba corrompido, mientras me sonreía, profanaba con placer. Lo que al principio parecía una simple venganza, ahora era su Ambrosía.
Sentí que el aire me cortó , el frío congelaba mis entrañas, la luz no quería dejar de mirarme y una sombra no paraba de perseguirme.
El luto consumía su corazón. Por la mañana el deseo de primavera lo acompañó, pero el corazón de ella apuntaba en otro sentido. La separación se sintió fría como el invierno. Era de noche y bajo la luz del faro, ella no aparecía.
Parecía que dudaba por dónde ir, se dirigió al norte, luego al sur; parecía inquieto y sin rumbo, hasta que el destino lo guió a la ciudad de los necros.
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ResponderEliminarJuliana Zuluaga
ResponderEliminar~ Me desperté debido al ardor que provocaban las llamas en mi piel causadas por el accidente que no puedo recordar.
~ Él no era capaz de aceptarlo, pero ya no podía negarlo, ella lo estaba engañando y con lágrimas en los ojos dijo:"Si yo no puedo tenerla nadie más lo hará".
~ Solo él sabía que estaba por suceder, sin razón aparente todos se comportaban como si algo o alguien los controlara.
~ Tal vez él podría salvarse, pero aquellas voces me decían una y otra vez que lo empujara...
~ Despierto del sueño, abro mis ojos y veo que todo es oscuro, húmedo, rodeado de tierra. Me tranquilice durmiendo con esperanza de recordar. Después de todo, mis memorias retoman al pensar que vivo.
ResponderEliminar~ El brillo de sus ojos refleja la linda y alegre vida que tengo, pero con tristeza me levanto y pienso que ese brillo se esta apagando con el tiempo.
~ Recuerdos de siglos y eones pasados en lugares donde todo era tristeza. Despues llegué de nuevo al lado feliz de la vida , pasando tiempo frente al demonio violento que atormenta a las almas muertas encontradas bajo la tierra.
~ Noche de gran brisa, cuando la gente se juntaba con sus amados en casa, un ruido desató la tensión del pueblo. Provenía del muelle pocos lo vieron pero no volvieron a ser los mismos.
-Un nuevo vecino llegó, era amargado y no le gustaba hablar con nadie, se escuchaba decir en las noches "La muerte es libertad, yo te liberé de este infierno".
ResponderEliminar-Una señora viene y me saluda. Estaba en mi casa, solo. Leía las cartas de siempre, recordando lo que había hecho. Ya era hora de partir.
- Era un juguete, no podía moverse. Llegó su ayuda, él estaba en colapso.
-Su fin llegaría, él la estaba observando, el mensaje llegó.
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ResponderEliminar~Un olor pútrido llenaba la habitación pero él seguía acariciando al desafortunado ya sin alma mientras me dirigía la misma sonrisa traviesa.
ResponderEliminar~Y por cada cuchillada que me propinaba, un deleite repentino brotaba dentro de mí.
~Tarde en la noche apagó la luz con el rostro impasible, el día anterior se había lamentado hasta el cansancio, 3 días después soltaba carcajadas donde él descansaba.
~La conductora no podía respirar de tanto reír pero detrás de esa sonrisa forzada se notaba cierto sentimiento de preocupación, parecía que ni ella sabía el camino.
• Le da la espalda a la luz sin dudarlo. Se dirige hacia el abismo con una postura soberbia. La soledad hermosa y absurda.
ResponderEliminar• Desde aquí observo el angustioso transcurrir de mi pasado. Tal valor adquirió mi corazón que nada temo ya.
• Solo en casa el frágil niño se esconde al escuchar el crujido de la puerta. Desde el armario busca la criatura que desde su imaginación se burla. Si está en su mente, ¿quién entró a la habitación?
• Al final del camino vio aleteando una mariposa. Su mirada regresó al pasado y soltó un pesado suspiro lleno de culpabilidad. Comenzó como un tornado y terminó como un aleteo. Que infortunio.
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ResponderEliminar*Como hermano mayor es mi deber protegerlos, esta casa es nuestra trinchera.
ResponderEliminar*Hoy debía ser un gran día para mi tío, ayer le pidió matrimonio a su prima con un elixir, en este momento se desconoce su paradero.
*Ayer vencieron al campeón, antier al favorito y mañana podrían ir contra el tramposo, pero este juego por la empanada se debe continuar.
*El FBI desconoce su hogar, lo incomprensible es que su persecución inició por una prueba de confianza tras limpiarse los zapatos.
La velocidad marcó su historia. Un automóvil que mancho su historia dándole a elegir un deplorable futuro que no quiere aceptar.
ResponderEliminarEse día determino mi vida. Aún de niño nunca me sentí capaz de ser carnicero, sin embargo aquella tarde me lo demostraría y más allá lo convirtió en un pleno placer.
Su llanto era asfixiante causado por su paisaje inmediato. Por su rostro se sabía que no volvería a ser la misma de ayer, creando un nuevo nacer sin sentido para mañana.
Miraba su tablero, el plan era perfecto y ya vendría la hora de actuar aunque en el fondo, su conciencia tambaleaba por su poca frialdad.
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ResponderEliminarEl aroma estaba corrompido, mientras me sonreía, profanaba con placer. Lo que al principio parecía una simple venganza, ahora era su Ambrosía.
ResponderEliminarSentí que el aire me cortó , el frío congelaba mis entrañas, la luz no quería dejar de mirarme y una sombra no paraba de perseguirme.
El luto consumía su corazón. Por la mañana el deseo de primavera lo acompañó, pero el corazón de ella apuntaba en otro sentido. La separación se sintió fría como el invierno. Era de noche y bajo la luz del faro, ella no aparecía.
Parecía que dudaba por dónde ir, se dirigió al norte, luego al sur; parecía inquieto y sin rumbo, hasta que el destino lo guió a la ciudad de los necros.